domingo, 2 de julio de 2017

Rozando el cielo

CAPÍTULO 23: PREPARANDO LA NAVIDAD

Teníamos que comprar todo lo necesario para la cena del día 24. Además tenía que comprar los regalos para mi hermana, Gabri, KiMin y HyunJo. Me hubiese gustado regalarle algo a BMS pero a penas los conocía bien y no me alcanzaba el dinero y para rematar mi pobreza también tenía que comprarme algo que ponerme. No podía ir hecha una pordiosera como pensaba ir. Tenía que encontrar para todos, algo bonito, barato y que les hiciera ilusión. Tarea muy difícil, encima HyunJo me interrogaba para saber por qué quería aprender a bordar.
       Claro, yo te enseño, pero, ¿para qué quieres aprender?
       Por nada, por saber.
       Si es por el pañuelo que te regalé, puedo hacerte otro, además ya lo has recuperado.
       No es por eso.
       Venga dímelo.-insistió.
       Está bien, quiero hacerle algo a mi hermana por navidad, para ahorrar algo de dinero, y es verdad que ella sabe tejer y bordar, pero no tiene mucho sentido pedirle a ella que me ayude si el regalo es para ella.- era mentira, ya tenía pensado su regalo.
       Está bien, esta noche cuando volvamos de comprar las cosas, te enseño, ¿araji?
       Dee, gomawo.- Éxito.
Nos preparamos para salir. No contaba con mucho presupuesto para los regalos, contaba con apenas unos cuantos wons, en cambio, para la comida, como se encargaba HyunJo teníamos más que suficiente. Dios si tenía tanto dinero que le costaba pagarme algo más por limpiar la casa. Primero fuimos a la zona de moda, gran error, HyunJo se volvía loco y para variar siempre lo dejaba atrás, porque a mí todo eso de ir de shopping no me gustaba demasiado y menos sabiendo que no iba a comprar nada para mí. Tenía clarísimo que les compraría. Mientras HyunJo se quedó aislado en un rodal de la tienda yo me la recorrí y encontré justo lo que necesitaba, aunque a causa de ello me quedé solamente con 10,000 won, seguro que con eso encontraba algo que ponerme, seguro, fijo. A Gabri le compré unas mallas con dos agujeros en los laterales de la rótula que luego se unían y unas botas militares en condiciones, sabía que le haría ilusión. A mi hermana le compré un jersey de esos con mucho pelo, con un estapado muy colorido, pero oscuro, abstracto que siempre había deseado, me hubiese gustado comprarle unas creepers en condiciones, pero eran demasiado caras. A HyunJo me hubiese gustado regalarle algo increible por todo lo que ha hecho por mí, pero no pude. Le compré un jersey de lino blanco que seguro le quedaba genial, también una pulsera igual a la que me compré yo para que siempre se acordase de mí y por último le imprimí una foto de los dos cuando nos conocimos en España y se la enmarqué. A quien no sabía qué comprarle era a KIMin. ¿Qué le haría ilusión? No tenía tiempo para pensarlo. Finalmente le compré un perfume, el mismo que olí en mi pañuelo cunado NeRa me lo devolvió, "one million by Pacco Rabanne". Bien ya tenía todo lo necesario comprado, ahora ya podía mirar algo para mí.
       HyunJo
       ¿Dee?- dijo mientras seguía mirando ropa.
       Ya terminé de hacer mis compras, solo falta comprarme algo. ¿Te queda mucho?
       Anny, enseguida acabo, mientras tanto mira algo para ti, en cuanto acabe te busco para ir a comprar la comida juntos.
       Arasseo.
Todo me parecía demasiado para mí, solo quería algo sencillo y barato, sobre todo barato. Tras mucho mirar encontré el conjunto perfecto. Era una falda negra de cuero con un relieve escamado. Eran varias tiras que le daban como un aspecto de flecos. La parte superior consistia en una blusa color salmón, con detallitos plateados alrededor del cuello que le daban un toque muy sofisticado, también llevaba unos detalles en los hombros de la blusa, llevaba diminutas plumas que le aportaban mucha elegancia. Wow, era perfecto. Miré con mucho cuidado la etiqueta. Para mi sorpresa solo había una, se trataba de un vestido. Por favor que fuera barato, estaba claro que no lo iba a ser. Cuando miré lo que costaba casi tiro el maniquí. 200,000 won, estupendo. Solté el vestido y me fui a mirar a otra parte. Finalmente no me compré nada. No encontré nada que pudiera comprar con tan poco dinero, me pondría algo que tuviese por casa.
       Ya terminé, ya podemos ir a comprar. ¿Encontraste algo de tu agrado?
       Dee, pues claro, vamos.
       ¿Seguro? Te noto algo decaída.
       Para nada.- le sonreí.- Vamos que hay mucho que comprar.
       Arasseo, vamos.
HyunJo dejó que yo me ocupase de comprar todo, ya que yo iba a ser la que iba a cocinar. Tendría a mano el número de algún resaurante por si un caso, no quería envenenarlos. Como apenas sabía nada de comida coreana, también cogí ingredientes típicos españoles. Al final tardamos más de la cuenta y HyunJo me hechó la bronca por comprar demasiado. Apenas podíamos con las bolsas, tuvimos que pedir un taxi. Llegamos a casa a las 21:00. Descargamos las bolsas y las emparejamos.
       Aish, jinjja, por fin en casa, no pensé que comprarías tanto.
       Dee, mianhae, yo también estoy muy cansada.
       Esto, ¿elegiste un buen regalo para mí?
       Dee. ¡iaah! No te voy a decir lo que es, pero no te esperes gran cosa, y ¿tú a mí?
       Arasseo, ¿por qué tendría que verme obligado a regalarte algo?- lo miré- Babooo, pues claro, solo te digo que es algo que deseas con todo tu corazón y que te va a encantar.
       Entonces vas a subirme la paga, genial.
       Mírate como pide todavía más.
       Con esa miseria que me das apenas puedo sobrevivir ¿sabes?
       Me lo pensaré. Esto ¿tú no querías aprender a bordar?
       Oh, es verdad, no me acordaba, incluso he comprado los materiales.
       ¿Jinjja? Pues vamos a empezar ¿no?

HyunJo se desesperaba conmigo. Comenzamos la clase a las 21:30 hasta las 00:30, cuando HyunJo ya se rindió y me dijo que no podía más conmigo que era imposible enseñarme a hacer algo así. Me decepcioné, aun así, seguí intentándolo hasta que terminé lo que tenía que hacer, 6 horas más tarde. No había quedado perfecto, pero por lo menos era algo hecho por mí y me sentía muy orgullosa por ello. Estaba deseando ver la  cara de él cuando se lo diera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario